21 de abril de 2008

Dimmu Borgir "In Sorte Diaboli" (2007)

norbl
La verdad que este nuevo LP de los noruegos me sorprendió gratamente. Con el disco anterior "Death Cult Armageddon" (ya que la regrabación del maravilloso "Stormblast" no entra en consideración como nuevo disco) me habían dejado con un gusto un poco amargo: las canciones no eran malas, pero se echaba de menos la voz de Vortex, el maravilloso y chiflado vocalista (aquí también bajista) que también participa en Arcturus, Lamented Souls, etc....y formó parte de, entre otras bandas, Borknagar. Justamente las mejores eran aquellas en las que él participaba....Por otro lado la producción no me pareció lo suficientemente buena para el disco, ya que a la larga los temas terminaban sonando todos iguales dentro de un sonido mas bien chato y un poco desbalanceado en la mezcla (algo que ya les había pasado con "Spiritual Black Dimesions") y la verdad, mas allá de que en conjunto no era un disco malo, te hacía rascar la cabeza preguntándote que era lo que no terminaba de cerrar.
Ahora, con esta nueva obra, los hombres de negro se superaron, y parieron una obra casi tan descomunal, maléfica, épica, extrema, bizarra, oscura, y con ese toque de groove que tan bien les queda, como el lanzamiento del año 2001 "Puritanical Euphoric Misanthropia". Las intervenciones son soberbias, y no hay un punto específico para resaltar: Las guitarras están donde y como deben estar, el bajo de Vortex se escucha bastante y le da otra dimensión a la banda, lo mismo que su voz: es increíble lo que este monstruo puede hacer con sus cuerdas vocales, que seguramente se las robó a algún dios noruego, porque sino no se explican sus intervenciones en casi todas las canciones de este fantástico disco. Obviamente del baterista no se puede decir nada nuevo, ya que, creo, Dimmu Borgir era unas de las pocas bandas en la que no había intervenido: estamos hablando de Hellhammer, quien toca en Arcturus, Mayhem, Winds, Age of Silence, etc.........y creo que estuvo metido en la composición del disco y no sólo participando a modo de invitado, al igual que Vortex, que sacó un par de ideas de su otra banda Arcturus para jugar e intervenir con sus voces épicas en "In Sorte...". ¿Qué puedo decir de Mustis, el tecladista?. Que desde que entró en la banda, la música cobró unas dimensiones cinematográficas (y no me vengan con el "Hollywood metal" de los tanos Rhapsody!!!), y épicas que antes no tenía bajo ningún punto de vista: es el hombre que ayudó a Dimmu Borgir a salir de esas antiguas canciones, que si bien eran excelentes, no había mucho más para explorar en ellas.
Las canciones hablan por si solas, sonando mucho más extremas y thrasheras que las del disco anterior, pero muchísimo más gancheras y, al mismo tiempo, oscuras, realmente oscuras. Me gustaría destacar la que abre el disco con su introducción épico-sinfónica (¡que capo Mustis!!!!!!!!), el tema 3, que tiene un riff que podría pertenecer tranquilamente a algunos de los tres primeros discos de Immortal, y el tema 8 que es una nueva forma de escuchar en una sola canción al Dimmu Borgir de "Puritanical..." y al Arcturus más pesadillesco y burlón.
Otro punto a favor es la duración del disco, que puede parecer corto, pero no: los casi 43' que duran los nueve temas, los vuelven mucho más disfrutables, y al ser ésta una obra conceptual, se vuelve más sencillo seguir la historia, que le hace honor a la oscuridad y el extremismo del planteo actual de los noruegos; no voy a hacer hincapié en las letras pero hay una frase de la 1° canción, que resume el concepto del disco: "...I am hatred, darkness and despair..." ("...Soy odio, oscuridad y desesperación..."). Y aquí encontramos el punto que une a éste disco con la anterior discografía de la banda: siguen sonando y transmitiendo tanto odio como antaño, tan oscuros como en aquellos viejos buenos años...eso sí, ya perdieron esa cuota de romanticismo que poseían en los dos primeros discos, como así también su misticismo y rusticidad....pero lo reemplazaron por una calidad musical que pocas bandas del estilo poseen en la actualidad.

12 de abril de 2008

Morgion "Solinari" (1999)

solari
Increíble primer disco de esta banda norteamericana de Doom/Death (en realidad sería el segundo, contando el E.P. inicial "Among magestic ruins"). Canciones superprofundas, sin muchas complicaciones, pero con unos climas tan majestuosos que las melodías que hilvana este cuarteto casi pueden palparse y respirarse mientras disfruto de la música.
La música. Eso es lo importante aquí, no la imagen, no las declaraciones estúpidas....la música es la principal protagonista. Las guitarras tejen melodías hermosas, por momentos oscuras, por momentos luminosas, pero nunca olvidables. Haciendo una comparación un poco tonta, los dos guitarristas se entienden a la perfección, jugando con dobles armonías al modo que lo hacían los ingleses Iron Maiden. Es increíblemente hipnótico el trabajo realizado por Dwayne y Gary, con arpegios calmos y arranques de furia que te paralizan. Las guitarras se entretejen con los teclados, que a modo de colchones muy eficaces, rellenan todo el espacio, dando la impresión de estar escuchando al mismo universo respirar, crecer, expandirse frente de uno. Los golpes del baterista le terminan de dar la profundidad necesaria, siendo sus aportes fundamentales aunque no por ello complicados, ya que están ubicados en el momento justo de cada canción.
Podría estar días describiendo la música de Morgion (y no sólo la de éste disco, sino toda su obra, que al no ser muy larga, se vuelve más imprescindible para entender este estilo en la década pasada)...cada tema tiene vida propia, siendo el más sorprendente (por lo menos para mi) el 4, "Nightfall infernal" con sus 11' de profunda e incontenible miseria, y el tema que abre la placa "The Serpentines Scroll / Descent to Arawn"...aunque es inapropiado o egoísta destacar solo una canción ya que todas podrían ser elegidas por uno u otro motivo. Las estructuras elegidas son similares: momentos calmos, de reflexión, de introspección, donde la angustia está en un lugar preponderante, seguidos de pasajes más violentos donde lo que predomina pareciera ser cierta furia antes contenida.....belleza pura. Todo adornado con arreglos casi progresivos.
Las letras abordan la misma temática que evoca la música: Introspección, la inmensidad del cosmos...Muestras hay un montón: "Camino entre este panteón, para recoger las estrellas, bendiciendo la encerada luna, y tragándome el sol, pues puedo adivinar la llegada de Dios, ascendente Cielo, descendiente Infierno, pues seré un elegante rey, y la víspera será mi recompensa, así como está escrito, así será hecho, la caída del padre, la caída del sol"(Canticle). "Está atento, pues podrías ser hechizado por su presencia, por su encanto. En lo profundo del cosmos, en su trono de estrellas y vacío, cada palabra hablada, invocando. Cada sílaba, una runa. Por cada emoción serás responsable, como las arenas del tiempo desde que cayeron. Un ahumado sobre la pálida carne, para formar la oscuridad creciendo dentro del corazón, dentro de la mente, como la caída de mil dioses.Solinari"(Solinari)..... también podría seguir....unas letras tan oscuras y crípticas como la misma música que las sostiene.....
Un hermoso viaje a tierras llenas de oscuros recovecos, tinieblas hirvientes, anocheceres infernales, océanos sin costas, una naturaleza tan majestuosa e imponente que paraliza la respiración, y un cielo tan desoladamente hermoso como el arte que ilustra la portada del disco. Disfruten esta maravilla y nos vemos en "Cloaked by Ages, crowned in Earth"