26 de abril de 2015

Leviathan "Scar Sighted" (2015)

mostros
Otro monstruoso disco de Wrest, alma mater de Leviathan, esa bestia unipersonal que supo sacar discos bestiales y tenebrosos como pocos.
Verdaderamente, es un tipo que de climas perturbadores la sabe lunga, y con pocas variaciones, logra generar alteraciones del estado de ánimo de aquel que se atreve a acercarse a su música. Porque, seamos honestos, esto está lejísimo de aquello en lo que se transformó el Black Metal con el correr de los años: es decir, esa cosa pulcra, melódica, casi ausente de alma y sentimiento. No, lo de Wrest y Leviathan no va por ese lado, lo de él/ellos es el odio, el asco, el desprecio por todo lo que sería la actualidad del Black Metal, y una adoración implícita, -para disfrutar entre líneas- del ocultismo y los seres primitivos que poblaban el universo, antes de que el hombre llegue al planeta.
Es cierto, nada de eso hay en las letras, pero es imposible no pensar en seres sobrenaturales (como los que aparecen en el sobre interno acompañando a cada composición), y en el poder que sus sonidos portan y laceran a los que se victimizan y sollozan que ya no hay nada bueno, que todo está hecho, y que el metal suena plástico.
Siempre me llamó la atención el tratamiento que hacen este tipo de bandas, en este tipo de géneros, que cuando bajan las revoluciones y se ponen más oscuros, trasmiten una maldad casi inabordable que mete miedo en serio y te crispa los nervios, a la vez que, vaya paradoja- te (me) relaja y me predispone gratamente para un sinfín de actos no violentos.
Para remarcar, EL tema del disco, es el que le da título al mismo, y oscila, deambula entre el ambient más hijo de puta, el noise más enfermo, el drone más refinado y el black más kvlt y nekro.
Déjense de joder y tomen un buen trago de estricnina diluida en café, mientras se dejan inundar por la miseria, el odio, la maldad y el vómito de la humanidad en formato musical.
Uno de los discos más importantes del año, y uno de los más desesperantes.

Moonspell "Extinct" (2015)

darklord
Fuimos para atrás, como para tomar impulso y saltar un abismo que parecía infranqueable. Es que mis neuronas no pueden dejar de pensar en discos que todavía hoy, y con tantos años encima de escuchas, no tolero ("Sin/Pecado", "Darkness and Hope", "Memorial", en menor medida "The Butterfly effect"), no porque sean malos en si mismos, sino porque sencillamente porque me producen hastío, aburrimiento...son tan faltos de alma como "Host" y "Believe in Nothing" de los geniales Paradise Lost, y se les nota igual la necesidad de hacer guita en lugar de componer.
Por eso cuando me enteré del nuevo lanzamiento de los portugueses, lo único que apareció en mi cabeza fue un "mmmm...mejor busco alguna banda de Funeral Doom de Rusia, que están haciendo cosas piolas y disfrutables".
Pero, no pude evitarlo y escuché el nuevo disco, y en buena hora que me tengo que meter mis palabras bien dentro del culo, y volver a emocionarme como lo hice con aquellos clásicos que todos sabemos cuales son.
En este disco hay canciones bien extremas, pero también relajadas y bien góticas y rockeras. Es como si lo mejor que saben hacer Ribeiro y los suyos estuviesen condensados en estos casi 46 minutos, lo cual es más práctico que aquel disco doble del año 2012, que no estuvo nada mal...pero esto es mejor.
Un inicio con un hit perfecto que mezcla la extremidad con lo cadencioso de aquel "Irreligious", y con toques bien electro que dejan como saldo una descarga de adrenalina en el cuerpo que pide por más.
El toque industrial está ahí nomás, en el segundo track, título del lanzamiento, y con una sección percusiva que realmente se luce, y ni que hablar de las violas que juguetean entre ellas magistralmente mientras el bajo gordo y seco de Aires Pereira dice presente como hace mucho no se lo escuchaba, y las teclas están donde tienen que estar.
"Medusalem" podría ser la relectura de los portugueses de bandas como Sisters of Mercy y The Mission, esas bestias de los 80' que entregaban canciones gancheras y oscuras por igual cautivando a público tan diverso que después influyeron en la creación del metal gótico.
Este tema es una de las frutillas del disco, con ese músico genial de Yossi Sassi (Ex Orphaned Land) entregando melodías maravillosas.
También hay lugar para esos tonos tristes, apesadumbrados y con una cuota de erotismo y sensualidad que Fernando desprende cada vez que calienta sus cuerdas vocales, y me atrevo a decir que cada vez canta mejor, cada vez brinda mayores matices con su arte,  y eso siempre se agradece.
De más está decir que me parece uno de los grandes discos de Moonspell, uno de los más disfrutables y cancioneros de lo que va del año, y uno que seguramente lo escucharé años después...y me seguirá pareciendo relevante,como esos clásicos que todos conocemos.

22 de abril de 2015

Cradle of Filth "Cruelty and the beast" (1998)

cof
Como verán, estoy retrocediendo últimamente, para buscar cosas olvidadas, o dejadas atrás por el frenesí de escuchar solo lo nuevo.
Y en eso de escuchar solo lo nuevo, perdemos de vista discos que valen la pena...
Este...¿vale la pena? Ufff...con el paso de los años tengo sensaciones encontradas, que incluso fueron tema de charla con el Conde, de este mismo blog.
Musical y compositivamente es el último disco de los Cradle relevante (con "Midian" un poquito por debajo), con un pie puesto en climas barrocos y gótico-sinfónicos, y otro en el heavy metal más clásico (guitarras gemelas maidenescas a la cabeza), alejándose cada vez más de la crudeza black característica de sus inicios, y dándole una vuelta más que interesante a la temática vampírico-erótica. Porque estamos frente a un hermoso disco conceptual sostenido en la Condesa húngara Elizabeth Báthory (esa acerca de la cual también escribió nuestra genial Alejandra Pizarnik).
El sobre interno es un verdadero lujo y la producción fotográfica alcanza niveles que de tan altos, se tornarían imposibles de superar, o alcanzar en lanzamientos futuros. Todos los miembros, como ya era típico en los discos anteriores, aparecen en fotografías logradísimas, dando la idea de ser una banda imbuida de lo terrorífico y lo gótico. Como para darle un toque extra, la actriz emblemática que representara a la Condesa en películas de los '70, Ingrid Pitt, aparece haciendo aportes en los tracks 7 y 8 (si mal no recuerdo) bajo la forma de narraciones que le dan un clima más que interesante al disco, que de a poco va mostrando también influencias mas thrashers.
El grave problema de este lanzamiento (y de muchos de esa época) fue la producción, ya que si bien las guitarras están bien al frente, junto con los teclados, no tienen la fuerza ni el peso que mostraran en "Dusk and her embrace", sonando por momentos apagadas...y la batería...la puta madre con esa batería!! Está más triggeada que la mierda y pareciera que al gran Nicholas Barker (último L.P. en el que participa, por cierto) lo habían puesto a tocar una máquina de coser. 
Todavía me da vueltas en la cabeza la idea de este disco con otra producción y una mezcla menos chata...estaríamos hablando tal vez del disco definitivo de Dani Filth y los suyos....pero ese para mi es "Dusk and her embrace".

20 de abril de 2015

Katatonia "Jhva Elohim Meth" -demo-(1993)

jem
Escuchando nuevamente la discografía de los suecos, no puedo creer que clara la tenían ya en sus comienzos, sonando ajustados y con sutilezas dignas de gente que lleva varios años en esto de crear música...siendo este su segundo demo.
Ya se deja escuchar la melancolía y la tristeza que caracterizara a ediciones posteriores -los llamados clásicos-, pero con una cuota de doom que está presente solo en esa joya increíble que constituye su segundo L.P. "Brave Murder Day".
Lo Black no está tan evidente, aunque si respirás cerca de este demo, puede que se meta en tu menta un poco de oscuridad, de esa maldita que para los que vivimos los '90, fue imposible de sacar después.
Música oscura, maligna y triste, y de una paradojal frescura, como hace tiempo no escuchaba.

6 de abril de 2015

"Crash", James G. Ballard (1973)

Recuerdo haber visto mucho antes de conocer de la existencia del libro, esa obra maravillosa del maestro David Cronemberg del año 1996, plagada de actorazos del carajo...y que resultó ser una adaptación de esta novela. Cuando la agarré por primera vez allá hace tiempo, no me impactó, me aburrió y la dejé apenas empezada.
Pero en pleno 2015, soy evidentemente otro.
Supongamos que el sintagma "hacer el amor" no existe, ni tiene sentido alguno; el sexo es simplemente eso, pero con un agregado, con una soldadura extra, la conjunción entre cuerpos mutilados y/o marcados por accidentes y autos/aviones, etc.....bordes filosos y cortantes de máquinas utilizadas para el transporte de personas como complemento perfecto de la cópula entre seres absolutamente deshumanizados signados por una satisfacción a costa de lo que sea, incluso de la muerte misma.
Y supongamos que la argamasa de aquella soldadura monstruosa o perversa, se lleva adelante sin una pizca de erotismo o, incluso, amor...sino tan solo sexo sucio, brusco y bizarro entre personas que llevan adelante la recreación de accidentes de famosos, elevando al ideal a aquellos que más tullidos quedaron, y siendo todos absolutamente intercambiables.
Eso es "Crash", y mucho más. 
Acaso sea la perturbadora unión entre pornografía casi hardcore y ese tono industrial de humanos maquinizados, a los cuales les da lo mismo rozar el vinilo del asiento manchado de esperma/sangre o mirar a personas tullidas cogiendo para excitarse -a pesar de que ea tu propia esposa la que es cogida por otro en la parte del auto que vos estás manejando.
Una de las novelas más jodidas del buenazo de Ballard, uno de los libros más perturbadores que leí en años, y uno de los ejemplos más claros de lo que el concepto de perversión en sentido estricto implica.
Un libro obligatorio.