Así como Noruega es una máquina de parir bandas, Alemania no se queda atrás para nada, con un número oficial de 7331 bandas (ya sean estas activas, separadas o con el nombre cambiado, según metal-archives).
Empyrium son de Alemania precisamente, y lo de ellos roza lo poético, emocionando hasta las lágrimas a quienes se acercan por primera vez a su obra.
Y si encima tuviste la suerte de encontrarte con este disco en particular (el primero) cuando ya fuiste tocado por la música extrema, la sorpresa y la emoción se pueden multiplicar de tal forma que se puede transformar en un disco adictivo y maravilloso como pocos.
Encima todo lo hecho en el disco ayuda a crear un clima en donde la naturaleza tiene tanta fuerza y poder que puede hacer con vos lo que quiera: "Nosotros, los miembros de Empyrium, queremos agradecerles por mirar esta marca como una expresión de la sobrecogedora belleza de la naturaleza...lo que inspira tan fuertemente nuestro arte. Así, decidimos dedicar completamente nuestro trabajo a nuestra poderosa madre tierra. Solo aquellos que cultivan los frutos pueden cosecharlos. SALVEN AL PLANETA". Toda una declaración, y una guía absoluta para entender la discografía completa de la banda.
Y parece mentira, pero hasta se pueden respirar los olores del atardecer mientras escuchás el disco. Creo que me paso solo con otra banda, y esa es Agalloch.
Con Empyrium probé durante un viaje a Bariloche, al suroeste de Argentina (si quieren fotos de esos paisajes los subo, no hay problema). Llevé los tres primeros discos, y el trance fue instantáneo, los bosques parecían tener no solo otros colores, sino nuevos sabores y texturas, el agua de esos arroyos y de los lagos eran más claras y puras....un bálsamo para el alma...el lugar y la música que me acompañaba.
Incluso las voces te llevan a creer que es la misma poderosa madre tierra que te habla con dolor, y te infunde el temor a desaparecer. Y así lo cantan en uno de los versos de la canción "The Yearning: ...mi dolor es infinito, donde estáis quien sanará mis heridas?..."
Con el arte de Empyrium, vale la pena sufrir un tenue dolor a ser restañado por la música del dúo alemán.
Otro disco indispensable para disfrutar durante algún atardecer entre los árboles de algún bosque cercano. Van a ver como cambia la cosa. Una obra de arte sensible y sencilla. Emotiva. Bella.
Shhhhh....escuchen el sollozo de la naturaleza.
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