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Tres tipos totalmente imbuidos del misticismo, la grandilocuencia, la magnificencia épica de la cultura egipcia. Realmente cuando un disco logra transmitir lo que se propone inclusive desde el arte de tapa, es porque estamos ante un producto que, por lo menos, podemos decir que es honesto...y Nile, es 100% honestidad, brutalidad y épica locura egipcia transmitida en formato de música extrema, pero no por esto falta de melodía.
Lo que pasa es que las melodías que utilizan en función del clima que buscan transmitir es tan extraña a la cultura occidental, como fascinante para la misma...y mal que nos pese pertenecemos a dicha cultura.
Una seguidilla de 11 canciones en poco más de 30', infectados de referencias a dioses sumerios, divinidades egipcias (Antiu es una de ellas), hechizos que rechazan a los demonios a que regresen al desierto de donde llegaron en un supuesto idioma antiguo, sacrificios humanos realizados a los dioses de la sangre, invocaciones de dioses portadores de plagas, loas a la grandeza de Pazuzu (el dios de cuatro alas que aparece en el exorcista, para que tengan una referencia), coros tibetanos ejecutados por el Gyuto Drupka Tibetan Monks, que realmente meten miedo y proporcionan ese clima épico y esa sensación de estar presenciando una de esas películas de momias tan terroríficas como las que se realizaban hace unos cuantos años....todo esto acompañado (y como cereza del postre, pesado postre) por extraños instrumentos tales como dumbecks (una especia de timbaletas orientales típicas del medio oriente), tambores damaru (tambores rituales del Tibet realizados con cráneos humanos), flautas de huesos...en fin....la amalgama es realmente increíble...todo esto aderezado por muchas influencias y referencias del maestro Lovecraft (de hecho la última canción esta inspirada en un relato de este genio de la literatura de horror).
Escuchen y experimenten la sensación.
http://lix.in/-d51234
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