No solo anduve escuchando buena música en sus diversos formatos y estilos (Death, doom, stoner, Heavy, Thrash, Progresivo, Black)...también me topé con basura igualmente descomunal.
Estoy molesto conmigo mismo, sobre todo porque de alguna forma le sigo prestando atención a estos suecos que hace más de una década que no hacen un disco...no digo genial, pero medianamente bueno y que me sorprenda positivamente.
Y eso, cabe aclararlo, es también culpa mia.
Todavía recuerdo la impresión que me causó ese exceso de adrenalina y vértigo en formato musical de esos discos irremplazables: "Lunar Strain" (1994), "The Jester Race" (1996) y "Whoracle" (1997).
¿Que queda de eso?
Nada, absolutamente nada. Nada de ese vértigo, nada de esas melodías clásicas entrelazadas con riffs extremos...nada de esa pesadez melódica y esa montaña rusa de sensaciones que de forma aparentemente tan fácil lograban trasmitir.
Pareciera como si se hubieran enamorado de esas bandas americanas pedorras New Metal (Papa Roach, Disturbed, Limp Bizkit), y en el mismo camino hubiesen regalado todo el talento para componer uno....un solo riff memorable.
Totalmente olvidable...que suerte que volvió At The Gates, Carcass y que Dark Tranquility nunca se fue.
Una basofia descomunal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario