caos |
Hay muchísimas formas de sacarse la ira contenida para no salir a matar al hijo de puta que tenés al lado y que te quiere cagar.
Entre ellas, se puede escuchar música, a modo de catarsis salvadora.
El problema es cuando elegís a los noruegos, que de catárticos no tienen una mierda, y peor todavía, si te encontrás con el regreso de Attila Csihar, aquel que aterrorizara a todo el under en esa obra maestra titulada "De Mysteriis Dom Sathanas" (1994).
Y el regreso viene acompañado con todo lo necesario para que el disco entre en esa categoría de obligatorio para buscar años después entre bateas y archivos varios.
El sonido parece haber sido conseguido en las profundidades de alguna mazmorra medieval, y ni hablar del sonido logrado en batería por Hellhammer, que parece que fue asesorado por Fenriz de Darkthrone para lograr una simpleza y rusticidad única.
Las guitarras no se quedan atrás, y es lo que se destaca a lo largo de los casi 41' que dura el disco. Pero no solo eso. Lo que hace ese artista único llamado Attila con sus cuerdas vocales es DESCOMUNAL, encontrando una veta aún más oscura para su arte, y habiendo tomado nota de sus participaciones en proyectos igualmente extremos, pero en el polo opuesto (Sunn O))), por ejemplo), los aplica en su antigua nueva banda.
Mugre noruega repleta de maldad y gelidez, que asustaría inclusive hasta al propio Sauron.
¿Puede Mayhem tener a su alcance climas tan terroríficos como algunas bandas ambient o Drone? Escuchen y respondan uds.
Por mi parte, uno de los mejores discos de ese año, y de la banda.
P.D.: no se me fueron las ganas de matar a esos 5 hijos de puta.
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