Venía caminando por la calle, y de repente empiezo a escuchar un griterío ensordecedor, sonidos que no sabía a ciencia cierta de dónde provenían, ni por supuesto su sentido o significación. Esto me produjo, literalmente una paralización momentánea, y mis sentidos comenzaron a manifestar una disfunción evidente, ya que las sensaciones y percepciones se mezclaban entre si...incluso en un momento comencé a tener convulsiones y a gritar como un enfermo mental incoherencias, que mucho tiempo después recién cobrarían sentido para mi golpeado y entumecido sistema nervioso.
De repente las convulsiones y comportamientos extraños se terminan, y me relajo profundamente, tanto que casi no me doy cuenta que estoy en el medio de la calle, así que avanzo hasta una plaza y me ubico en un asiento de la misma. Me siento y sigo sin entender. Empiezo a pensar que tal vez me esté volviendo definitiva e irremediablemente loco, pero no se.
Y entonces, ocurre...silencio.....perturbador pero reconfortante silencio. Algo me dice que ya no soy el mismo. Que ya no me asustaré tan fácilmente....que al final todo se terminó solucionando.
Y me pregunto a que se debe este silencio.....miro el reloj y pasaron exactamente 21'02'' de locura inexplicable, para después dar lugar al silencio.....silencio.....¡¡¡Claro, que boludo, se terminó el disco de "The Locust"!!!. Bienvenidos a 21' de locura Grindcore experimental, el sinsentido hecho música.
No hay comentarios:
Publicar un comentario