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Esa idea y concepto sonoro llegó hasta el año 1996, con la edición del descomunal "Nemesis Divina".
Y a partir de allí, con los e.p.'s de los años 1997 y 1999 se preparó el camino para el nuevo lanzamiento de ese último año, "Rebel Extravaganza", en donde esa primitiva y mítica furia medieval avanzaba unos cuantos siglos para incrustarse en las modernas ciudades del planeta, tornando su propuesta más moderna pero no por ello menos negra y violenta.
Lo expuesto en ese disco (uno de los mejores de ese año), se ve incrementado y modificado en este nuevo lanzamiento, sonando más simple y menos industrial, pero un poco más oscuro.
Y esa es la primera característica que sale a la luz luego de una rápida escucha. Es impresionante como, cuando las bandas de Black Metal bajan las revoluciones, se incrementa la sensación de maldad y odio transmitido. Y si a eso le añadimos que ya de por sí esta banda es bastante "maligna", el resultado es realmente muy bueno. Incluso la participación de algunas voces femeninas en "Angstridden" le dan un tono tan amenazante y perturbador que se hace difícil no resaltar esta canción.
La perla del disco en tanto corte de difusión es ese Rock n' Roll negro lleno de odio y misantropía titulado "Fuel for Hatred", con uno de los riffs más impresionantes y gancheros de toda la discografía de los noruegos. En "Possessed" está el tema más acelerado del disco, justo antes de "Repined Bastard Nation", otro de los clásicos de la banda, con esos riffs repetitivos que no hacen más que ponerte en trance al promediar el disco. En "Mental Mercury" encuentro otro abordaje melódico y de tempo, que no hace sino resaltar las grandes dotes de compositor de Satyr, para terminar con ese terrible himno lleno de maldad y sonidos lacerantes titulado "Black Lava", que con sus casi 15 minutos, cierra el disco de la mejor manera.
Un increíble disco de Black Metal del Siglo XXI, como corresponde a la historia trazada por Satyricon.
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